Un pudding para servir bien frío, un postre saludable para el que no necesitas encender la cocina ni añadir azúcar, lleno de sabor, que recuerda a una compota de albaricoque.
Pudding de albaricoque con semillas de chía (1 vaso de postre)
5-6 albaricoques (según tamaño)
La raspadura de ¼ de limón y 1-2 cucharadas de zumo
1 cucharadita colmada de semillas de chía
1 plátano pequeño maduro
Elaboración:
Pelamos los albaricoques, rallamos la piel del limón y lo ponemos en el vaso de la batidora junto con el zumo de limón (puedes ajustar la cantidad de zumo a tu gusto). Añadimos las semillas de chía y trituramos hasta que quede un puré homogéneo. Guardamos en la nevera para que se hidraten la chía, 2-3 horas o si lo prefieres de un día para otro.
Antes de servir trituramos el plátano hasta que quede convertido en una crema, lo ponemos por encima de nuestro pudding y espolvoreamos unas semillas de chía por encima.
Se puede tomar tal cual o utilizarlo como si fuese una compota, como acompañamiento de un porridge de avena para desayunar, dando sabor a un yogurt (vegetal o de vaca), …